HISTORIA DE LA PARROQUIA

HISTORIA DE LA PARROQUIA

No sabemos con precisión la fecha de la construcción de la primera capilla para la comunidad, especialmente agrícola, que se había ido estableciendo en el “rancho del Torreón”, a partir del año de l850.

2.- La Presencia en Torreón 

2.1 Historia de la Parroquia.

LUISA IBARRA DE ZULOAGA ASUME BAJO SU CARGO LA ADMINISTRACIÓN DE LA HACIENDA DE SAN ANTONIO DEL COYOTE

FEBRERO 20, 1865 — 1883

A la muerte de don Leonardo Zuloaga, su viuda Luisa Ibarra de Zuloaga se hace cargo de sus negocios, acumulando numerosas deudas y concesionando las tierras de su propiedad a administradores y compañías privadas. En 1867 el rancho del Torreón, aún de su propiedad pasa a ser hacienda, el torreón que le da nombre es destruido por el río Nazas un año después y reconstruido a las faldas del Cerro de la Cruz.

2.1.1. Los inicios.

No sabemos con precisión la fecha de la construcción de la primera capilla para la comunidad, especialmente agrícola, que se había ido estableciendo en el “rancho del Torreón”, a partir del año de l850. En ese año se construye un dique o muro de piedra en el lugar conocido como Boca de Calabazas, para aprovechamiento de las aguas broncas del río Nazas; así como una casa de adobe para el administrador, con un torreón para la vigilancia. Este dio origen al nombre del lugar, por la forma espontánea de la gente al referirte al “rancho del torrión” (llamado así por la gente de aquellos años).

Presa y edificación fueron destruidas por una creciente del río el 14 de septiembre de l868, lo que obligó a una nueva construcción de la finca y su torreón en un lugar más seguro, al igual que la reposición de la presa, esta vez llamada del Coyote.

La gente que se iba estableciendo en el lugar acudía, para los momentos más importantes de su vida religiosa (Bautismo, Matrimonio), a las capillas de los pueblos mayores cercanos: Viesca y Matamoros, desde l870 más especialmente.

2.1.2 Primera Capilla

Sabemos la tendencia espontánea de nuestro pueblo, en su religiosidad popular, de fijarse un lugar: cruz de camino, ermita, pequeña capilla; en donde depositar sus “ex votos”, ofrendas, y a donde acude a encomendarse. Seguramente así fue el inicio de la capillita que años más tarde sería la amplia iglesia – santuario de Guadalupe a la que ahora acudimos.

Se tiene noticia de que en la década de 1870 se construyó una pequeña capilla cerca de la casa grande del torreón.

1870 — 1894

Existen registros de una pequeña capilla cercana al torreón que le da nombre a la población en la que el padre Francisco Rojas Murga, perteneciente a la diócesis de Matamoros, acudía para atender las necesidades religiosas de la comunidad, llevando los primeros registros de bautismo en Matamoros.

24 DE AGOSTO, 1883 — 1887

Después de ser acusada de colaborar con el Imperio encabezado por Maximiliano de Habsburgo, ver confiscadas y después recuperadas sus propiedades, Luisa Ibarra de Zuloaga acumula deudas impagables con la empresa alemana Agustín Gutheil & Cía.

En 1883 llega a La Laguna Andrés Eppen, representante de la compañía sucesora, Rapp, Sommer & Cía. Es gracias a la gestión de Eppen llega el mismo año el Ferrocarril Central Mexicano.

Fue al año siguiente, en el año de 1884, cuando los Claretianos llegaron a la Santa Veracruz en Toluca, Estado de México. En este momento los claretianos no tenían en la mente esta primera capilla abrir un frente misionero en lo que era Torreón, sin embargo, hay que tener presentes  algunos aspectos de la realidad contextual en la que estaba la iglesia en ese momento:

  • Estructura eclesial ligada a Roma.
  • Llegada de nuevas congregaciones religiosas (enseñanzas, misiones populares y atención a desvalidos).
  • Iglesia contra la masonería y liberalismo.

Al centrarse en el segundo aspecto, dio entrada a las distintas  congregaciones que atendieron la Parroquia como fueron los redentoristas, y los carmelitas antes de la llegada de los Hijos del Inmaculado Corazón de María.

hist 1 minSiguiendo con la historia de Torreón, fue en el año 1879 que llegó a la ya en ese momento Hacienda de Torreón el Sr. Andrés Eppen, precursor y promotor del crecimiento de Torreón; promovió la llegada del ferrocarril y contrató al ingeniero Federico Wulff para lotificar los terrenos adyacentes a las vías del ferrocarril.

En esa lotificación, correspondió al terreno donde se encontraba la capilla: el lote C de la Manzana 31, y fue entregado para la construcción de una iglesia el 31 de marzo de l890.

Y fue en este momento, sin tener fecha exacta, no se sabe desde cuándo, pero la gente del lugar comenzó a recibir atención espiritual y pastoral más directa por medio de visitas periódicas del sacerdote de Matamoros. Sin ser aún Parroquia, se iniciaron los libros de registro en esta “iglesita” a partir del mes de agosto de l893; de esa fecha al 18 de noviembre de l894 se registraron 485 bautismos y 20 matrimonios.

Ya para 1899, se celebró un Concilio plenario con los obispos de América Latina, teniendo como sede el Vaticano. Para este entonces el clero secular pudo organizarse en el servicio pastoral: crearon obispados, seminarios, llegaron nuevas congregaciones de carisma misionera y educacional, asociación católica de seglares, se fundaron congregaciones religiosas mexicanas y, otras, regresaron del exilio.

hist 2 minLlegando a la última década del siglo XIX, los claretianos ya estaban afincados en tierra mexicana en forma sólida, aunque su llegada a la Parroquia de Guadalupe tardaría todavía unos años. Los Hijos del Inmaculado Corazón de María contaban con seis comunidades establecidas y en plena actividad apostólica,. Cuarenta y siete misioneros sacerdotes y 26 hermanos coadjutores hacían un número respetable de 73 religiosos.

En esos primeros quince años de expansión, la figura canónica que normaba todo el sistema comunitario era la llamada Visitaduría: un superior delegado del superior general, con el título de Visitador, era la autoridad máxima de los misioneros en la república. Pero, la figura jurídica de las comunidades de la Congregación cambió a partir del Capítulo General de 1895. Desde entonces los dos visitadores en el continente americano, Chile y México, dejaron de depender del superior general. La Congregación se organizaba en provincias; las comunidades de Chile pasaban a depender de la Provincia de Castilla, y la  de México, de la de Cataluña. Los provinciales de España, por tanto, nombraron a sus representantes al otro lado del mundo: en Chile al P. Antonio Molinero, y en México al P. Domingo Solá. Por eso, a comienzos de 1899 el P. Xifré aceptaba por fin la renuncia al cargo de Visitador que tantas veces le había presentado el P. Solá.[1] Todo esto como una síntesis de la realidad de la Congregación en México, en el mismo tiempo que en Torreón se erigía la primera parroquia para el servicio de la feligresía.

El siguiente esquema resume lo tratado en los párrafos anteriores

hist 3 min

2.1.3 Origen de la Parroquia.

hist 4 minEl 19 de julio de l893, tomó posesión de la nueva Diócesis de Saltillo –creada el 22 de junio de l891- su Primer Obispo Don Santiago Garza Zambrano.

Una de las primeras diligencias del Sr. Garza Zambrano fue realizar una Visita Pastoral a la recién creada diócesis. Fue en los meses de la segunda mitad de l894 cuando le tocó la Visita a la ya entonces Villa de Torreón (decreto del 24 de febrero de l893) y que contaba entonces con alrededor de 6,000 habitantes.

Resultado de esa Visita Pastoral fue la determinación del Sr. Obispo de constituir en Parroquia a la “iglesita” de Torreón, que para esa fecha comenzaba a ser ampliada.

Se llevo la acción inicial en la pequeña capillita que había servido a la Vicaria, pero de inmediato se procedió a transformarla en algo más grande, y a la nueva Iglesia, bastante amplia, pero de adobe, fue inaugurada el 12 de octubre de 1896 por su Señor Cura, El Padre Prudenciano Villalobos.

2.1.3.1 El decreto de erección está fechado y firmado el 27 de Diciembre de l894 y dice:

“En la villa del Torreón a los 27 días de diciembre de 1894 el Ilmo. Sr. Santiago Garza Zambrano, Obispo de Saltillo, habiendo visto con sus propios ojos la antigua iglesita, como también lo que está en construcción, y todo lo que es necesario para el divino culto en una parroquia; atendiendo oral del mismo Sr. Cura y de los principales vecinos de la villa; visto también los ingresos parroquiales y gastos del culto; visto que es una población y que todo el municipio tiene más de mil almas; considerando que da la Congrua suficiente para la decente vida del Cura; considerando que el colegio Tridentino en el Capítulo IV de la sección XXI manda erigir parroquias; considerando que es un beneficio espiritual para todas la almas estando sujeta a un pastor que les dé alimentos espirituales y les predique la palabra de Dios; considerando que es para engrandecimiento y culto divino, S.S. Ilma. erigía y erigió esta iglesia en parroquia, llevando el nombre de Nuestra Señora de Guadalupe de Torreón, o sea Parroquia de Guadalupe de Torreón. Teniendo por límites todos los que tiene el municipio de Torreón y quedando independiente de la parroquia de Matamoros y de todas las colindantes. Debiendo llevar el Cura el Cuadrante de obvenciones para el pago de la asignación diocesana y de la Pensión Conciliar, cuya cuenta deberá liquidar cada mes, para que la Sgda. Mitra tenga noticias de la Congrua que disfruta el Sr. Cura, llevará un libro de diezmos, del que dará cuenta cada mes.; Libro de Fábrica, al que ingresen todas las limosnas de los fieles, colectas e ingresos de arancel que mandará a la Sgda. Mitra cada año. Llevará los libros de asientos de bautismos, matrimonios y entierros y este libro será de gobierno para que en este ponga todas las circulares y disposiciones diocesanas.

Así S.S. Ima. El primer Obispo de Saltillo, lo decretó y lo firmó. - Santiago Garza Zambrano, Obispo de Saltillo. Rúbrica. ( Falta pie de página)

2.2 Reseña Histórica de la Parroquia

hist 5 min

hist 6 minEl P. Pudenciano Villalobos, joven sacerdote designado como el primer párroco de la recién erigida parroquia llega a la Villa de Torreón hacia noviembre de 1894. La iglesia fue formalmente declarada parroquia el 27 de diciembre de 1894.

La Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe fue así la primera parroquia de Torreón y de ella como Parroquia Madre fueron desprendiéndose otras, en la medida que la población crecía y para una mejor atención espiritual y pastoral.

"A nivel religioso la iglesia es un icono materno que congrega a un Torreón cosmopolita que proviene de entidades vecinas o bien de países de EUA, Alemania, de China o de origen libanés".

Esto representa una amalgama de culturas que permiten la creación de una ciudad llamada Torreón, hecho que ocurrió hasta el año de 1907.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 hist 7 min  hist 7 min  hist 7 min

 

 

2.3 El Templo de Guadalupe.

Al referirnos al “templo” de Guadalupe, nos referimos al local material o edificio en el que se reúne la comunidad y celebra su fe; y que en el caso de la Parroquia de Guadalupe ha tenido muchas transformaciones.

2.3.1 Primera Construcción.

Hay que recordar que para la década de l870, sin tener precisiones más detalladas de fecha, la gente construyó una pequeña capilla, cerca de la casa grande del rancho de Torreón.

2.3.2 Segunda Construcción.

El primer párroco Pudenciano Villalobos, sintió como una necesidad urgente la ampliación de la capilla, muy reducida para la población que requería sus servicios y así, con el apoyo de la feligresía, promovió la construcción de una iglesia más grande, obra que llevó cerca del año, siendo su inauguración con una Misa Solemne el 12 de octubre de 1895.

2.3.3 Tercera Construcción.

En 1901, solo seis años después de inaugurada la iglesia ampliada en l895, ya resulta nuevamente insuficiente, por lo que el entonces párroco Don Hilario Arpón se lanza a motivar a la gente, formando de entre ellos una Junta Parroquial, para la construcción de una nueva iglesia más espaciosa.

Esta obra se llevó casi diez años en sus distintas etapas: cimentación, muros techados, piso, etc. En ese lapso pasaron por la Parroquia siete párrocos a los que les tocó ir impulsando el avance de la obra.

Fue en el año l906 cuando, ante el avance de la obra se echó abajo la iglesita de l895, siendo párroco el P. Juan G. Carrasco.

Y el mismo P. Carrasco, en un segundo período de párroco, le tocó dar los últimos toques a esta nueva iglesia, con la colocación del piso, era el año 1910, siendo Párroco el P. Carlos Cherer, el cual era diocesano. Hay que recordar que fue este año en que inicio el conflicto revolucionario. El templo resultó un edificio de estilo renacentista, espacioso, bien ventilado y bastante iluminado; de tres naves, con 38 metros de largo y 20 de ancho.

El mismo P. Carrasco construyó una incipiente y deficiente casa parroquial.

2.4 La Imagen de Nuestra Señora.

hist 10 minSobre la elección de la Virgen de Guadalupe como patrona del templo, cabe mencionar que esto fue decidido por el obispo Santiago García Zambrano, quien realizó un recorrido en ese tiempo y al buscar en la Hacienda de Torreón observa un fuerte crecimiento gracias a la llegada del tren, lo cual atrae a nacionales y extranjeros. Fue el mismo obispo que decidió dejar al cobijo de la Virgen Morena esta población que iba creciendo y  sobre todo en una zona de desierto podría ser un gran referente.

Siendo párroco el P. Juan G. Carrasco, al completarse la obra del primer nuevo templo, en 1910 se adquirió un hermoso cuadro de la Virgen de Guadalupe, ante la que desfilarían por muchos años, sus hijos devotos.

2.5 Obras de Mantenimiento.

Los años siguientes, se irían realizando las obras normales de mantenimiento, mejoría, embellecimiento etc. que con el avance del tiempo se van haciendo necesarias: reforzamiento de cimientos, reparación de muros, revestimiento de fachada, renovación de pisos, altares, bancas, púlpito, comulgatorio, etc., etc.

Sin embargo, crecía el pueblo y la Iglesia debía crecer también, y apenas 6 años más tarde el Señor Cura Don Hilarión Arpón puso la primera piedra para las nuevas obras, logrando levantar los muros a unos 3 metros aproximadamente; siguió la obra del Señor Cura Don Juan Alfonso Rodríguez quien la dejó en soleras. El Señor Cura Don Manuel F. López techó el templo y derribó la obra primitiva. El Señor Cura Don Juan C. Carrasco levantó la casa cural y enjarró la nueva Iglesia. Posteriormente fue complementándose su ornato. Tenía este Templo 36 metros de largo, 22.20 de ancho y una altura (aproximada) de 14 metros en la nave central.

Pero no sólo eran paredes y techo, casa e Iglesia, sino que en ella desde esa fecha hasta el año de 1912, el clero Diocesano de Saltillo atendió a su feligresía con el esfuerzo de 11 Señores Curas que cada día lucharon por mejorar y ampliar las actividades parroquiales.[2]

Al parecer se había ya dado una respuesta satisfactoria a las necesidades de la creciente población de Torreón que, en 1907, mediante decreto del 15 de septiembre, fue reconocida como Ciudad.

Todo esto sucedió antes y durante la Revolución Mexicana y  hay que tomar como dato colateral que la ciudad de Torreón fue tomada por los federales y después entraba en batalla con los revolucionarios, siendo la última, la de abril de 1914 la más importante, en la que la parroquia no sufrió ningún daño físico. En estos difíciles años de la Revolución Mexicana, estuvieron al frente de la Parroquia los PP. Carmelitas, Josefinos y Redentoristas y ya el deseo de servicio se precisaba, porque eran difíciles las cosas en aquellos años.

Haremos aquí un “salto”, para darle continuidad al tema de las transformaciones y mejoras en lo material, más adelante se tratará sobre la llegada de la Congregación Misionera.

En 1935, el padre Fernando Santesteban CMF, superior y párroco de la Iglesia de Guadalupe, inició una serie de obras materiales de la misma. Comenzó a revisar las paredes del recinto, que presentaban un aspecto deplorable; mandó colocar la instalación eléctrica de forma subterránea, se reforzaron y protegieron las esquinas de las pilastras con guardas de bronce… también se pintó el tejado de la Iglesia.

Durante los años de 1955 a 1957, en que estuvo al frente de la Parroquia el P. Ismael Casas, se recubrió el Exterior de la Iglesia y las columnas de la misma con paramento de Mármol; se retiraron los canceles y el pulpito; se empotraron los confesionarios en la pared.

El padre Ben, posteriormente consideró que a la remodelación a la iglesia le faltaba la construcción de las torres, por lo que propone construir las dos torres que hoy día se pueden apreciar de color rosa, de estilo neogótico.

En la siguiente administración de 1957 al 1960, con el P. Carlos Ripa CMF, se mandaron construir 72 bancas, se instalaron 6 grandes aparatos de refrigeración.

2.6 Escuela Parroquial

hist 11 min

En 1917, incluso cuando todavía no terminaba la Revolución Mexicana se abrió la primera escuela parroquial a cargo de los HH. Maristas. El así llamado “El Torreón” era un colegio de la parroquia para la parroquia. Siendo Párroco el Señor Cura Don Nicasio R. del Castillo, padre Josefino.

La quinta base del contrato de fundación, dice: Los PP. Misioneros conservarán y mejorarán la actual escuela parroquial. En este edificio anexo a la Parroquia funcionaba la escuela, muy decaída al recibirla nosotros, por no tener profesores competentes, ni medios con que procurárselos; además siendo la escuela completamente gratuita, las personas algo acomodadas no querían enviar a ella sus hijos, pues se juntarían con los del arroyo. A pesar de estas y otras deficiencias, no se puede negar el bien que se hacía a muchos niños; las leyes de Calles prohibiendo toda enseñanza católica y fiscalizando hasta el exceso la enseñanza privada, acabaron con todo; más no se ha abandonado la idea de restablecer dicha escuela, acomodándose a las circunstancias, aunque cada día se tropieza con nuevas y mayores dificultades a causa de leyes vigentes en la materia. [3]

Con la Ley Calles se da una devoción callada hacia la iglesia, la cual mantiene en forma subterránea su fervor, sin afectar el trabajo de los padres y la espiritualidad con la que se llevaban a cabo los trabajos con la feligresía.

La ley Calles es creada en 1927, por lo cual es deducible que la escuela parroquial, todavía existía para inicios de los años 30, dado que en el 31 es cuando regresan los Misioneros Claretianos a cargo del P. Mariano Álvarez López CMF, y es cuando se habla en el contrato la conservación y la mejora de la Escuela Parroquial.

Abril 1967.

El día 3 de llega el P. Carlos Ripa, actual superior de Guadalajara, para tomar parte en la celebración de las bodas de Plata. Siendo párroco de Torreón-Guadalupe el P. Ripa tuvo la construcción del edificio que actualmente ocupa el Colegio “El Torreón” en la calle Zaragoza.

El día 4 de Abril llegan por la mañana los R.P. Julián M. Miqueles y Antonio Canudas para tomar parte en la celebración de las Bodas de Plata del Colegio El Torreón.

El día 6 de Abril a las 8.30 Hrs. solemne primera comunión del 60 alumnos del Colegio El Torreón como una de las celebraciones de las Bodas de Plata. Celebra y predica el R. P. Antonio Canudas, quien así mismo bendice el órgano Hammond que debido a sus iniciales diligencias ha sido recientemente adquirido por esta Iglesia.

Abril 7 Misa Concelebrada por las bodas de Plata del Colegio El Torreón. Principal concelebrante ha sido el Excmo. Señor Obispo Diocesano Don Fernando Romo Gutiérrez, acompañado por los anteriores Párrocos de Guadalupe RR.PP. Julián M. Miqueles, Carlos Ripa, Antonio Canudas y Tomás Páramo. El P. Juan José Pérez, en calidad de monitor dirige a la concurrencia en tanto que el P. Arturo González esta al frente de la parte coral formada por la totalidad de los alumnos del colegio. La ceremonia ha sido lucida y ha impresionado a su Excia Rvma.[4]

2.7 Llegada de los Misioneros Claretianos a Torreón

2.7.1 Arribo de los misioneros

…los motivos de las fundaciones en América obedecieron en los hijos de Claret a un gran sentido carismático de ser portadores de la Palabra que libera y que va haciendo brotar el Reino de Dios en tierras y gentes muy concretas, particularmente entre los empobrecidos; con un fuerte compromiso con las iglesias locales y sus pastores; valiéndose de todos los medios posibles, con tal de que fueran estructuras aptas para la difusión de la Palabra; con un amoroso compromiso de difusión del carisma cordimariano como elemento de primer orden para conocer a Jesús y vivir los valores del Reino.[5]

Los Claretianos arribaron a la Parroquia de Guadalupe en 1923, es decir, el contexto histórico de su llegada a la ciudad está marcado por un ambiente de demasiada tensión. La carta constitutiva lo marca el 19 de octubre de 1923

  1. Fundación Jurídica de la Casa

… Dificultades ajenas a nosotros impidieron la fundación y aunque el Sr. Obispo trató diferentes veces de realizarla, no se creyó entonces prudente aceptarla con cargo Parroquial. Nuevas Platicas del Sr. Obispo con el P. Mariano Comesias, Provincial de México de 1923 a 1929 cristalizaron con el contrato celebrado por ambas partes, firmado por el Rmo. P. General y reconocido por la Santa Sede, por el que se nos entregaba a perpetuidad la Iglesia Parroquial de Ntra. Sra. De Guadalupe de Torreón, con las condiciones, cargos y privilegios ordinarios en esta clase de fundaciones.

El contrato fue firmado el 19 de octubre de 1923 y dos meses después el 18 de  Diciembre el R. P. Filomeno Pérez a nombre de la Congregación recibió la Iglesia de manos del P. José María García. Días más tarde llegaban los misioneros destinados a la nueva fundación, fueron los PP. Antonio Aynadé, Lucio Zaldevere, Anastacio Aparicio y León Aguado, con el Hno. Juan Parada (q.e.p.d.) al poco tiempo de establecidos nuestros Misioneros en Torreón acaeció la muerte del P. Juan C. Carrasco, Párroco de la cercana población de Sn Pedro de las Colonias, asistido por el P. Filomeno Pérez.[6] 

Después del P. Filomeno Pérez CMF se tuvieron que suspender las actividades pastorales, durante 5 años que duró la persecución religiosa, hasta la llegada del P. Mariano Alvarez López CMF; y desde ese tiempo no ha sido suspendida nuevamente. Los hijos del Inmaculado Corazón de María, la han atendido de manera ininterrumpida.

“Dado el crecimiento y desarrollo que con toda rapidez se ha operado en todos los ramos de la riqueza pública de la floreciente Villa del Torreón y la importancia que ha adquirido” … ¿Qué estaba pasando en ese entonces? Torreón es tan joven que algunos hechos ocurridos hace un siglo todavía nos alcanzan. Un año antes se llevó a cabo la primera emisión de radio. Un año después, exactamente en septiembre, nació el Ford T y la producción en serie y el mundo empezó a andar en automóvil.[7]

Torreón pasó  de ser una simple parada de Ferrocarril a una ciudad plena. Torreón tenía 15 años de haber sido nombrada como ciudad a la llegada de los claretianos en 1923, y obviamente la cifra de 26 mil habitantes con que se contaba en su fundación ya había crecido, y la parroquia de Guadalupe era la única que daba atención espiritual en ese momento, con diversas capillas que después fueron Filiales.

La cita menciona datos para poderse imaginar la realidad de Torreón en el momento de su fundación, hay otras cosas que no habían cambiado incluso para arribo de los Claretianos primero en 1923 y después en 1930. De aquí dependían muchos ranchos, mismos que también eran atendidos espiritualmente, la población se dedicaba principalmente a la agricultura, siendo el algodón el principal cultivo, Había población migrante de distintas partes, además de población extranjera entre los que destacan  chinos, libaneses y americanos, etc. Torreón nació moderna, y continuó con ese crecimiento modernista hasta casi la década de los 30, al amparo de inventos que en otras partes del mundo transformaban formas de vivir. El ferrocarril, que en otras partes cambió para siempre el comercio de bienes y la migración de personas, vino aquí a dar el soplo de vida a la ciudad,[8] por lo que el cuadro de la realidad que tenían que atender los misioneros claretianos era bastante complejo y multifactorial.

Además, con la Ley Calles, decretada en 1927, no permitía el culto religioso abierto, por lo que se mantuvo una fe y una devoción callada, por lo cual se mantiene en forma subterránea el fervor, sin afectar el trabajo de los padres y la espiritualidad con la que se llevaban a cabo los trabajos con la feligresía. Y hay que enfatizar que fueron bastantes años los que los misioneros Claretianos tuvieron que trabajar en estas circunstancias.

Cabe mencionar que la unión de los distintos grupos y los Padres Claretianos es algo a rescatar, ya que los seglares ayudaron y asintieron la labor que el crecimiento exigía, tanto para las obras de mantenimiento como la de su crecimiento espiritual. El arribo del segundo periodo se da con el P. Mariano Álvarez López CMF, y desde entonces se ha atendido de manera ininterrumpida.

II.- Condición Jurídica de la Casa Parroquial.

1°) Esta Casa-Parroquia se fundo el 18 de diciembre de 1923. Existe de Fundación firmado por el Excmo. y Rmo. Sr. Dn. Jesús Ma. Echavarría, obispo de la Diócesis y por el M.R.P. Mariano Comesías, por parte de la Congregación. La interpretación de dicho contrato no ha sido uniforme, pues últimamente, el M.R.P. Prudencio Lerena, aconsejado de eminente jurista, ha declarado ser esta Parroquia, en virtud del contrato, verdadera Parroquia Religiosa, “pleno jure”, en contra de lo que anteriormente se creía.

2°) Jurídicamente la Casa de Torreón ha dado un cambio completo que conviene aclarar y determinar con el Excmo. Sr. Obispo, como parte firmante del contrato de Fundación. Esta aclaración es absolutamente necesaria para obviar dificultades a los presentes y venideros. Las demás cuestiones relacionadas con la Fundación y Primeras Actividades se hallan consignadas en la paginas 19,20 y 21 del Boletín de la Provincia, tomo 1°.[9]

Sin tomar en cuenta lo anterior, el párroco P. Filomeno Pérez CMF y su equipo de trabajo empezaron con las obras de mantenimiento mencionadas anteriormente además de otras como un artístico cancel de madera con emplomados que fueron colocados en el trienio de 1924 a 1926.

Entrando, a mano izquierda, se encuentra una pequeña capilla dedicada a San Judas Tadeo, lugar que por muchos años fue el Bautisterio y en el que nacieron a la vida cristiana infinidad de torreonenses y otros laguneros. La protege una reja de hierro colocada en los años veinte.

…los motivos de las fundaciones en América obedecieron en los hijos de Claret a un gran sentido carismático de ser portadores de la Palabra que libera y que va haciendo brotar el Reino de Dios en tierras y gentes muy concretas, particularmente entre los empobrecidos; con un fuerte compromiso con las iglesias locales y sus pastores; valiéndose de todos los medios posibles, con tal de que fueran estructuras aptas para la difusión de la Palabra; con un amoroso compromiso de difusión del carisma cordimariano como elemento de primer orden para conocer a Jesús y vivir los valores del Reino.[10]

hist 12 min

El culto seguía aumentado con la más frecuente predicación y mayores facilidades para la adoración, se estableció la Hora Santa diaria, con permiso tanto del Sr. Obispo como del P. Provincial. Esto atrajo muchísimos fieles y casi todos los días se veía llena durante la Hora Santa, dice la crónica. La Hora Santa continuó teniéndose diariamente, aunque la asistencia haya disminuido un tanto por virtud de la inconstancia que domina en todas las cosas humanas, actualmente se tiene de forma semanal. Para facilitar a los fieles el cumplimiento del precepto, los domingos y días de fiesta se decían ocho misas, cinco en la Iglesia Parroquial y tres en las Capillas; cada P. está facultado para decir tres misas en tales días. La asistencia a los enfermos es tal vez el trabajo más pesado y dificil. Muchos días son dos y tres en tiempos ordinarios los enfermos que hay que visitar, y muchos en tales condiciones de rudeza y miseria con su ordinario acompañante la falta de aseo, que es necesario armarse fuertemente de la Caridad de Cristo, para reprimir cualquier rebelión de la carne. El confesionario consume también buena parte del tiempo y actividades de los P.P.; así durante las Misas y el acto de la tarde se encuentra algún confesor en el ejercicio de su ministerio; los sábados después de la doctrina de la tarde se atiende a numerosos niños y niñas de la Cruzada Eucarística; la víspera de los primeros viernes, días 12, días y fiestas de las Asociaciones, representan varias horas de confesionario. Índice revelador son las 70.000 comuniones repartidas en el año, cifra notable atendiendo el carácter algo frío de la gente.

El siguiente esquema refleja esa franja de tiempo desde la llegada de los Misioneros Claretianos

[1] Es un fundador de la Congregación en tierras mexicanas. Al llegar a América tenía 41 años, y a los 32 años ya era elegido consultor general de la Congregación. … el P. Xifré le confió la tarea de fundar comunidades en México, a donde llegó en 1884. Tuvo el cargo de superior y visitador hasta 1899, fecha en que regresó a España. Hombre de fina cultura, inteligente y virtuoso, fue un verdadero padre para sus hermanos, a quienes dejó el ejemplo de su dedicación al trabajo, su amor a las tareas misioneras, su devoción mariana y su fidelidad abnegada.

hist 13 min

[2] Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, Censo Parroquial 1987.

[3] Crónicas de la Parroquia.

[4] Crónicas de la Parroquia.

[5] Crónicas de la Parroquia.

[6] Crónicas de la Parroquia.

[7] “100 años” en El Siglo de Torreón https://www.elsiglodetorreon.com.mx/noticia/2007/100-anos.html (vi: 28 de junio de 2023)

[8] Cfr. Loc. Cit.

[9] Crónicas de la Parroquia

[10] Historia Claretianos en México,

LA PARROQUIA

La Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe en Torreón, Coahuila, se estableció el 27 de diciembre de 1894 por el Obispo Santiago Garza Zambrano. Abarcó todo el municipio de Torreón, independizándose de parroquias circundantes.

CONTACTO

This form was created by ChronoForms 8